TARÁS BULBA, LA NOVELA DE NIKOLÁI GÓLGO
(Entre la lejanía y lo cercano del ser humano)
Autor: Francisco José García Carbonell
Nikolái Gólgo, para mí el mayor genio de las letras rusas, hace en sus obras un retrato de la realidad inhumana, un retrato que quizás se podría resumir en una frase suya: “No puedes ni imaginar cuán estúpido se ha vuelto el mundo entero”.
¿Hay algo quizás que nos pueda ayudar a salir de este estúpido sueño en que nos ha sumido eso que viene de fuera?, ¿ese sueño, parafraseando al genial escritor ruso, que confunde incluso al hombre más inteligente? Yo creo que la respuesta está en lo cercano, en llegar a lo lejano a través de lo cercano y no al revés.
Tarás Bulba es la historia de un viejo cosaco zaporogo y sus dos hijos, Ostap y Andréi, que se ven envueltos en torno a un ideal romántico que termina por tener un desenlace fatal. Es pues que este gran relato de heroica lucha en una zona como es Ucrania, y que por desgracia la historia no quiere dejar que viva en paz, incluso en nuestra actualidad, presenta también una mezcla de lirica nostalgia que eleva la misma a un nivel solo comparable a los grandes clásicos antiguos de nuestra literatura.
En esta novela se crea esa trágica disyuntiva que lleva incluso a que un padre sacrifique al hijo que se ha apartado del espíritu de su pueblo debido al crudo apego de la carne. El amor por una joven arrastra a este al mayor de los pecados y es pues, que a través de una metáfora de la caída, merece que el propio progenitor acabe con su vida. En cambio, y en contraposición con este primero, el otro hijo que cae prisionero mantiene la dignidad delante de sus verdugos casi hasta el último suspiro. Antes de terminar muerto en manos de estos grita al padre, lo busca, y este que se haya escondido entre los presentes responde a sus suplicas, se lanza a su rescate. Pero pronto se da cuenta que debe huir, no puede hacer nada. Aún así el ideal que ha llevado al hijo hasta el cadalso resucita con más pasión en los corazones de aquellos aguerridos cosacos, la lucha no cesa y no cesará al menos hasta que haya muerto el último de la estirpe.
Es así que esta historia de indomables hombres movidos por claras pasiones, y que nos sitúan ante una novela entre la tradición romántica y el realismo, cuyo estilo literario, forma y dinamismo apenas encuentran parangón en la literatura de entonces, nos traslada a la complejidad que mueve de siempre la convivencia entre los hombres. No existe el blanco de la distancia que marca el ideal pues siempre surge un punto irracional en toda historia que lo trastorna, que le da incluso un cariz absurdo que debemos tener en cuenta para entender al otro, para entendernos, en definitiva, a nosotros mismos.
TARÁS BULBA, LA NOVELA DE NIKOLÁI GÓLGO