“POEMAS DE UN MUNDO SALVAJE”
Este Poemario reúne algunos versos que Mario Raimundo Caimacán escribió integrados a sus obras narrativas y ensayos, porque no se considera poeta, solo se atreve a escribir sus versos cumpliendo la tradición histórica de los escritores costromeros, aficionados a insertar poemas en sus narraciones conforme a la herencia cervantina. Caimacán lo hace hasta en sus ensayos y así se gestó “Poemas de un Mundo Salvaje”, y su audacia la facilita el moderno verso libre, la democrática invención de la vanguardia poética de finales del siglo XIX. Estos sencillos versos sin pretensiones de trascendencia no tienen otro valor que reflejar la actual época de mengua que vive Hispanoamérica y la eterna barbarie que aún sufre la Humanidad, sus atavismos y taras morales, por eso abundan las referencias y condenas a las dictaduras y tiranías, a las guerras, a los fanatismos políticos, religiosos y raciales, a la pobreza, a la discriminación contra las mujeres, la opresión y las miserias que esclavizan a gran parte de la Humanidad, porque vivimos en un mundo salvaje y los niveles de salvajismo aumentan o disminuyen en la amplia geografía humana ¿La cultísima Europa no engendró los criminales Totalitarismos Comunista, Fascista y Nazi, que aún tienen irracionales seguidores? ¿La discriminación contra las mujeres, la mejor mitad de la Humanidad, no es un terrible mal generalizado? ¿La ambición de dictadores y camarillas políticas no son los culpables de tantos crímenes y del atraso y la miseria de tantos países de América Latina, Asia y África? ¿Estados Unidos de América no reitera con alarmante frecuencia su atávico racismo cada vez que un inocente hombre negro o hispano muere por la brutalidad policial perpetrada por homicidas amparados en sus uniformes? ¿Y cuántos negros, judíos, turcos, árabes y otros miembros de minorías étnicas o religiosas son agredidos verbal o físicamente en la blanca Europa con pasmosa frecuencia? ¿Y los fanatismos religiosos y el delirante racismo, no son los causantes de tantas matanzas en todo el ancho mundo? ¿El Terrorismo y los Genocidios no se alimentan de los fanatismos religiosos, el racismo y el extremismo político? Apenas a finales del siglo XIX se declaró ilegal la esclavitud, suma de todos los crímenes, generalizada “institución” en la mayoría de las sociedades humanas, derrotada por la máquina de vapor, ¿Y soberbios, nos creemos muy civilizados? Ahora campea victoriosa “la Esclavitud Moderna” y las guerras, las matanzas y genocidios son el pan de cada día. La criminal discriminación contra las mujeres persiste y muchos ignorantes pretenden justificarla en tradiciones religiosas o culturales. El racismo y la explotación infantil también persisten, son terribles males que aún no logramos extirpar. Aún somos una especie salvaje y egoísta, violenta y peligrosamente homicida. Y nuestro deplorable salvajismo, nuestra criminal barbarie, la constatamos al leer, escuchar o ver las noticias.
Este Poemario contiene los siguientes poemas:
1. Caín contra Ucrania y la Humanidad
2. Rogatoria ante la Gripe China
3. Estas Tierras que son España
4. Oración por los Presos Inocentes
5. A Cervantes Inmortal
6. A Santiago, Patrono de España
7. Guernica, 1937
8. Elegía a Miguel Hernández
9. El Arado de Aquiles
10. Elogio a Tersites
11. El Entrenamiento
12. El Llanto de Willy Brandt
13. Pequeña Oración a la Virgen
14. Pulla contra los Tinterillos
15. De Héroe a Tirano
16. Matemos al Cíclope
17. Regreso a la Barbarie
18. Insensatos
19. El Pan de los Esclavos
20. Costromo Encadenado
21. No Soy Poeta
22. Poema de Amor a Carolina K
23. Lamento por el Asesinato de una Mujer Persa
24. Plegaria al Dios Ausente
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MARIO RAIMUNDO CAIMACÁN
POEMAS DE UN MUNDO SALVAJE
También me llamó la atención que este Poemario “Poemas de un Mundo Salvaje” está compuesto, casi totalmente, por poesía épica, por poemas narrativos, y la poesía lírica está casi ausente, lo que constituye un “arcaísmo poético”, ya que la norma actual es que la poesía sea comúnmente lírica y la poesía épica una poesía en extinción. Pienso que ésta característica es la más notable del Poemario. Y tiene unos poemas muy pesimistas sobre la condición humana, y me puso a pensar que éste misterioso poeta tiene mucha razón. Lo llamo “poeta misterioso” porque no logré encontrar información sobre él aparte de la contenida en la promoción de sus libros. Creí en un momento que era un “nombre de letras” hasta que me fijé que en una revista literaria chilena publicaron su email. Parece que es chileno aunque su apellido es colombiano. Quizás es un exiliado porque sus versos reflejan una nostalgia, una tristeza, una añoranza de una tierra perdida. Quizás es un poeta muy reservado, aunque en todo caso es un verdadero poeta y leí su libro admirada, aunque Caimacán diga que no lo es. Les recomiendo a todos que lean el magnífico poemario que ésta valiosa revista, Luz Cultural, nos recomendó. Seguro les gustará. Rosalba P.
Creo que ya descubrí la nacionalidad de Mario Raimundo Caimacán: Lo más probable es que es nicaragüense, paisano de Sergio Ramírez y claro, del gran poeta Rubén Darío. Quizás es uno de los opositores contra la Dictadura a los que despojaron arbitrariamente de su nacionalidad, en violación de las normas internacionales para garantizar los Derechos Humanos. Es una hipótesis que surgió al leer con detenimiento el poema “De Héroe a Tirano” y aunque es este poemario Caimacán es implacable con muchas tiranías existentes en el mundo, este poema luce muy personal y creo que tanta pasión solo puede sentirla un nicaragüense. Rosalba P.
Revisé en la Internet y resulta que Caimacán es un apellido de origen turco, del extinto Imperio Otomano, y la palabra es un arabismo, que en Colombia (país donde más difundido está éste curioso apellido, equiparable al apellido “Coronel” en español) pudo tener su origen en los populares vendedores a cuotas, porque “los turcos”, muchas veces árabes, inventaron la venta a crédito pagaderas en cómodas cuotas semanales, quincenales o mensuales antes que los norteamericanos inventaran las tarjetas de crédito.
Le escribí otra vez a Mario Raimundo Caimacán, preguntándole sí era nicaragüense, entre otras cosas, y ésta fue su respuesta:
“Rosalba… Soy Hispanoamericano de Costromo, mi nación es la lengua castellana, la más extendida de las lenguas hispánicas, y para satisfacer tu curiosidad te digo que soy 20% indio (de América, no de la India), 20% negro mandinga, 20% español, 5% Griego (por Homero y la Democracia), 5% Italiano (por la Roma Antigua), 5% Judío (por Jesucristo), 5% Chino (por Sun Tzu) 5% Árabe (por “Las Mil y Una Noches”), otro 5% más Africano por Nelson Mandela y el restante 10% más de quién sabe qué, según informe mi ADN.
…Gracias Rosalba por tantas palabras generosas y ya que tú eres la primera lectora (y quizás la única) de mis poemas que me escribió un correo electrónico (prefiero la lengua de Cervantes antes que “email”), también serás la primera en leer éste poema (que estará en la versión actualizada de mi poemario) que tenía en borrador y el toque final me llegó por un comentario tuyo sobre las religiones (“los mandaría a todos bien lejos pal carajo”) en nuestra revista literaria favorita en Internet, “Luz Cultural”, que en breve recibirá también el poema por sí tengo suerte y lo publican:
LA MALETA
(A todas las valientes mujeres que rechazan la opresión de los fanáticos religiosos y tienen que escapar, o quieren escapar, de sus países para conservar la vida o alcanzar la libertad)
Pocos entendieron
Tu resolución inexorable,
Lo necesario era poco y tanto,
Y mucho el peso del pasado,
Querías ser libre,
Decidiste ser libre,
Y estaba de más, era un estorbo,
La Maleta del Pasado,
Ya no necesitas leer, nunca más,
Las páginas de ese libro medieval
Que tanto Mal te causó,
A ti y a millones más,
Tampoco querías ver nuevamente,
Las ropas de la opresión,
No querías saber más
De túnicas, mantas, batolas y balandranes,
De velos, hábitos, tocas, sayos, y capuchones
Y otros trapos de memoria macabra
Manchados de sangre, muerte e infamias,
Para ser libre en verdad
De las malas tradiciones,
De la opresión y la barbarie,
Que se hundan en el fétido pantano
O en el mar profundo
La profunda ignorancia
Y la manipulación interesada
De clérigos bárbaros,
Furibundos, mentirosos y malvados
?Cuándo Dios escribió libros o los inspiró,
Para condenar a las mujeres,
Su mejor y más bella creación?
Todos los escribieron los hombres
Con sus versiones egoístas
Y limitadas visiones,
Tan parciales como absurdas y erradas,
Libros para mantener a las mujeres encadenadas,
Oprimidas, sometidas, explotadas, esclavizadas,
Reducidas a la más infame prisión:
La exclusión, la discriminación,
La negación de sus derechos,
Ser tratadas como cosas o ganado,
Y siempre sometidas a un varón.
Nadie entendió que sonriente,
Lanzaras por la borda La Maleta,
Que traía tu Pasado,
Era solo un lastre,
Un obstáculo contra tu libertad tan anhelada
?Para qué un libraco lleno de mentiras y delirios?
?Para qué unos anacrónicos trapos,
Símbolos de opresión, resignación y ajeno dominio?
?Para qué anclarte en un mundo detestable,
Primitivo, cruel, injusto y miserable,
Que te obligó a huir de la tierra de tu padres?
Si hoy eres forastera, extranjeras,
Migrante, refugiada,
Emigrada, exiliada,
Expatriada, desterrada,
Hoy mismo que el mundo sea tu casa,
No te aferres a tradiciones malsanas,
A mandatos delirantes
Y disparatadas prohibiciones.
Borra de tu mente, de tu vida y tú futuro,
A los clérigos fanáticos
De un Dios distorsionado
Que es origen de tus males
?No bastan ya todas las desgracias,
Las barbaries, las muertes, las matanzas,
Para entender que la fé depende de los hombres,
De los tiempos y lugares?
Tu fé es herencia de tus mayores,
Tu lugar de nacimiento, la fecha,
Y quienes son tus padres.
Éstas realidades
Definen en todos,
Hombres y mujeres,
Nuestra lengua materna
Y la fé inculcada en la más tierna infancia.
Que nadie te engañe:
Los dogmas de cada fé
Son creaciones azarosas de los hombres,
Del tiempo y los lugares.
Sí el mismo Cristo
En lugar de nacer en Palestina,
En una familia pobre y judía,
En los tiempos de Herodes
Y bajo dominio Romano,
Hubiera nacido en Tokio,Ben Nankín,
En Calcuta, Alejandría o en Upsala,
No habría hablado arameo antiguo,
No habría creído en Jehová
Ni el Cristianismo fundado.
De nacer en Japón
Y no en la Judea de la Torá y el Talmud,
El Antiguo Testamento llamado,
Habría sido sintoísta
O un alegre y vitalista pagano;
Sí su cuna no quedara en Belén,
Sí quedara en la dulce y fría Escandinavia
O en otra tierra de las antes mentadas,
Quizás habría creído en Buda o Confucio,
En Mitra, Zeus, Odín, Júpiter, Isis, Ra o Shiva,
O en cualquier otro Dios
Adorado en la tierra de tus antepasados,
Que en suerte le tocara.
Muchos millones integran la Humanidad
Y las religiones son muchas y variadas.
Sí una es cierta, las otras son falsas,
Por éstas divisiones
Aún los hombres se matan.
Al escapar de tu país,
Porque los dogmas de tu fé te asfixiaban,
Probaste que mucho está mal
En la sociedad que abandonabas,
Donde las mujeres son aplastadas,
Viven sometidas, oprimidas,
Excluidas, marginadas,
Y a las rebeldes las matan.
Por eso huiste temerosa, espantada,
Intégrate ahora a la sociedad
En la que buscas libertad,
Sé coherente, no te aferres al Error
Que te obligó a huir desesperada.
Olvida la religión que te condenaba.
Haz tuya la tierra extranjera,
Que generosa te recibe y te salva.
Aprende su lengua, sus costumbres,
Constata que a todos nos une
La misma condición humana,
Que los naturales de tu nueva patria
Sean también tus amigos, tus hermanos
Y solo conserva lo bueno del pasado.
No tienes que olvidar tu tierra ni a tu gente,
Solo tener presente,
Que todos somos hijos de Dios
Y todas las tierras son sagradas,
Que el Estado y toda Iglesia
Deben estar siempre separados.
Sí están unidos no hay libertad
Y se imponen los tiranos.
Sólo se puede ser libre
En un país democrático,
En las Dictaduras todos son esclavos.
El Reino de Dios no es de éste mundo,
Éste es el mundo de la Humanidad imperfecta,
Siempre sufriente, buena o mala.
Vive en éste mundo
Y no te inquieten las palabras erradas
De tantos clérigos y “hombres de Dios”,
Cuando Dios así lo decida
Dirá Él mismo sus propias palabras.
Que ningún libro “sagrado” te marque como ganado.
Vive libre y sé feliz.
No te sometas a ningún predicador,
Clérigo, “Pastor” o “Profeta”,
A ningún hombre “Elegido” o “Iluminado”,
A ninguno que se crea “Santón” o “Predestinado”,
A ningún ambicioso, charlatán o alucinado.
Eres una mujer, no una simple oveja,
No eres rebaño ni ganado.
De “Profetas” del pasado
Está lleno el mundo,
Allá la gente ingenua
Que sus embustes les crea.
Sé libre y busca vivir feliz,
Dueña de tu propia vida y destino.
Sí lograste escapar
De la locura de los fanáticos y asesinos,
No cambies una esclavitud por otra,
Ni te hundas con la religión caduca y anticuada
Que llevó tu país al desastre.
No vives los tiempos de tus padres,
Tampoco los de tus abuelos:
Olvídate de dioses enfurecidos,
De Profecías y Profetas,
De Diablos, Demonios y Guerras Santas,
De Pecados y Virtudes, de Vicios y Castigos Capitales,
De Ayunos, Sacrificios y Penitencias,
De Fieles e Infieles, de Sumisos y Renegados,
De Gentiles, Conversos y Blasfemos,
De Descreídos, Herejes, Apóstatas y Profanadores,
De Paraísos Prometidos y de infiernos reales,
Del Fin del Mundo por la Cólera Divina,
De “La Ira de Dios” siempre amenazante,
No estamos en la Edad Media.
Olvida todas esas antiguallas,
Aterriza, ponte al día:
Éstos son tiempos de Internet y telefonía inalámbrica,
De redes sociales y calentamiento global,
De cambio energético y medicina genética,
De sustituir combustibles fósiles
Por limpia energía eléctrica,
Tiempos de Derechos Humanos
E Igualdad de Género.
De la Historia deja el basurero,
Vive tu propio tiempo,
Cuyas puertas el futuro te abren.
Ésto para todos vale:
Las religiones son inventos de los hombres,
Dios existe mucho antes.
No permitas que ninguna religión
Te oprima, te limite o te rebaje.
Mario Raimundo Caimacán (odiseosiglo20@protonmail.com Mayo de 2024)”