Paula Lobato Díez

Paula Lobato Díez

Carlos J. Rascón

Road movies

I am the passenger
and I ride and I ride.
I ride through the city’s backsides;
I see the stars come out of the sky.

The Passenger – Iggy Pop

Como en esas road movies donde la protagonista mira un paisaje
que se sucede delante de sus ojos,
y cambia, corre, huye.

Aunque en realidad lo único que corta el viento es ella dentro de su burbuja aleada
de metales y cristal.

¿Qué se mueve y qué se queda inmóvil?
Reflexiona sobre su vida mientras suena una canción de fondo
que se ajusta a la perfección con su historia pasada
y que consigue asentarse por encima
de las voces y el ruido.

En sus pupilas amarillea una imagen que se va difuminando
fotograma a fotograma tras la ventana
a causa de la velocidad y que el espectador ve,
si está atento,
resbalar ahogada dentro
de algunas fugaces lágrimas.

El coche se dirige hacia el mismo centro del atardecer,
arropado por una nube de humo.
Una mezcla de arena y, si lo firma Tarantino,
también cigarrillos.

Atrás queda la gran ciudad y ante sus ojos,
una promesa de libertad alza el vuelo.

Como ella, así se van sucediendo para mí los girasoles y las encinas
en un terreno que aunque verde, está quemado.

Y reciben el relevo pinos, algarrobos y almendros.

Cañaverales.

Pero el sol se acuesta en este caso a mis espaldas
y me abro camino entre plantas,
bañadas por una luz que no puede alcanzarme.

Ahora deberían salir los créditos y la pantalla se teñiría de negro,
invitando a la imaginación;
ya he terminado mi papel por hoy.

Pero una vida no dura dos horas y a mí nadie me ha dado el guion de mi película.

Soy candidata al Oscar por la mejor improvisación,
pero si me lo conceden
será demasiado tarde para irlo a recoger.

Ya echo de menos los vívidos recuerdos que nunca tendré,
no habrá secuela.

 

Paula Lobato Díez y a mis 20 años curso el grado de Estudios Ingleses en la Universidad Complutense de Madrid. Desde una edad muy temprana sentí una gran pasión por el arte en todas sus formas, puesto que es un vehículo de expresión indispensable para mí. Fui finalista durante mi educación primaria en un concurso de relatos organizado por la Comunidad de Madrid y desde aquel día no he dejado de escribir. Colaboro en seminarios de literatura en mi facultad y pese a que nunca he visto mis obras publicadas, las cuales pertenecen a mi poemario Mujer de agua y muerte, escribo por propia necesidad y disfrute.

 

 

0 0 votes
Article Rating
Suscribir
Notificar de
guest

Captcha *Límite de tiempo excedido. Por favor complete el captcha una vez más.

0 Comments
Más antiguo
Noticias Más votados
Inline Feedbacks
View all comments
0
Me encantaría saber tu opinión, por favor comenta.x
()
x