- La Reina Descalza de Ildefonso Falcones - 2 de julio de 2020
- La Señorita Juli, El sexo y Mermelada de Fresa (IV): De Loreto Sutil Jiménez - 27 de junio de 2020
- Palmeras en la Nieve de Luz Gabás - 20 de junio de 2020
La Ladrona de Libros de Markus Zusak
El hombre más feliz del mundo es aquel que sepa reconocer los méritos de los demás y pueda alegrarse del bien ajeno como si fuera propio.
Goethe
Una novela magistral, que tiene como originalidad máxima el narrador: la muerte. También podemos destacar cómo, a través de títulos y subtítulos, va dando pinceladas de lo que se avecina en la trama.
La novela está ubicada en la segunda guerra mundial. La protagonista del libro: Liesel es dada en adopción por su madre (de religión judía) a una familia alemana, después de dar sepultura a su propio hermano de seis años muerto durante el viaje. En esta casa, Liesel encuentra cariño y comprensión, sobre todo, del padre adoptivo (Hans Huberman) en el que encontró el consuelo que necesitaba, y la ayuda para aprender a leer; lo que consiguió con el primer libro que “robó” en el cementerio donde fue enterrado su hermano.
La vida de Liesel transcurre entre la pobreza y la escasez reinantes en la casa, el acordeón que tocaba Hans, la ropa que Rosa (su madrastra) lavaba, la sopa de guisantes, y su amigo Rudy.
Liesel, cada vez que tenía oportunidad, “robaba” un libro, ya fuera de una hoguera, o de la casa del alcalde… pues su pasión era la lectura.
El día que conoció a Max, “el judío”, fue muy importante para ella. Comprendió la bondad de sus padres, al comprobar que ocultaban en su casa un fugitivo; con el riesgo que eso suponía para ellos. Sin embargo, la presencia de Max, la enriqueció: conoció de cerca la tristeza, el dolor, la aflicción y la soledad; pero también la caridad, la generosidad, la inocencia y la valentía.
El libro es una pequeña joya y está lleno de metáforas; por ejemplo compara el cabello de Max con plumas muy suaves, y el de Rudy con el color del limón. El vocabulario es sencillo, pero las descripciones son extraordinarias; tanto que hacen que te metas de lleno en el ambiente de esa época, y que pueda ser leído y apto, igualmente, para jóvenes como para adultos.
Podemos encontrar muchos mensajes en el libro; entre ellos destacaría el poco valor que le damos en la actualidad a los libros y a la cultura, en un mundo en donde, en muchos países, hay exceso de todo. Otros fundamentales: la muerte que ronda y los horrores de las guerras.
La lectura del libro se pude complementar viendo la película, que tiene buena adaptación, pues de las novelas que no son excesivamente largas suelen captar bien el mensaje, en el tiempo que dura el filme. Personalmente, opino que los personajes no estuvieron bien elegidos, ni el vestuario fue correcto, sobre todo en Liesel (la protagonista); pues se supone, que era una época de extrema pobreza y necesidad, y que estaban delgados, desnutridos y exhaustos.
Y la muerte continúa haciendo su trabajo,
mientras en el Mundo existan guerras, violencia, terremotos, devastación… Ella estará ahí, recogiendo las almas en sus brazos y bolsillos, hacia la eternidad.
Como bien dice Ella: “Los humanos me acechan”.
Desnuda soy, desnuda digo: soñadora.
Mª Loreto Sutil Jiménez