Antagonismo de Fran Márquez y Cuauhtémoc Ponce
por Rodrigo Martínez Puerta
Excepcional rara avis creada a dos manos —¿o debería decirse a cuatro?— donde se establece, en principio, una curiosa parábola acerca del éxito y el fracaso para posteriormente ir desarrollándose en forma de entretenidísimo relato, dentro del cual cabe desde la aventura y el romance hasta la comedia bufa y el tema social, sin olvidar ciertas pinceladas de erotismo.
Lo original de esta obra reside en la particularidad de su puesta en escena: dos narradores distintos que responden a los arquetipos del triunfador y del perdedor y que se identifican claramente como paródicos sosías de los propios autores. Así pues, un español refinado y pedante, colmado de tanto éxito que es incapaz de asumir crítica alguna, narra una historia amorosa protagonizada por personajes jóvenes y modernos en un sofisticado entorno de lujo y dinero; en cambio, su némesis mexicana, un muerto de hambre chabacano, semianalfabeto y malencarado, nos adentra en la realidad social de las mafias y los narcos que gobiernan con puño de hierro los pueblos fronterizos, allí donde la explotación del débil es moneda de cambio habitual (en este caso nos transporta al ámbito de la prostitución).
Ante la naturaleza de tales premisas, uno tendería a pensar que se trata de un libro tragicómico en el que la línea entre lo ameno y lo dramático se bifurca claramente delimitada por la temática de sus narraciones, pero he ahí lo maravilloso de esta obra: nos equivocaríamos. Márquez y Ponce se alejan de los lugares comunes y añaden a sus respectivas historias un carácter más ambiguo del que pudiera adivinarse, de modo que la comedia romántica se vuelve esperpéntica e hilarantemente grotesca, mientras que el duro retrato social de la miseria y el hampa torna en una agradable road movie pese a lo desesperado de la huída. No contentos sólo con reinventar las diferentes línea argumentales, ambos autores además se las ingenian con astucia para hacer que sus dos tramas acaben confluyendo, es en este punto donde el lector descubre que está totalmente atrapado por el buen hacer tanto del español como del mexicano.
Otro de los puntos fuertes de la obra es su heterogeneidad estilística, la maestría en el manejo de los registros y el saber cómo dotar de credibilidad los ideolectos y variedades de cada personaje, todos ellos reconocibles por su manera de expresarse. La disparidad de la escritura de Márquez y de Ponce no choca en ningún momento, lejos de que el contraste pudiera provocar cierta irregularidad, o de que al lector se le antojara mejor uno que el otro, ambos estilos correlacionan y se complementan con inexplicable naturalidad, una especie de simbiosis que nos regala fragmentos memorables (la venta de la pistola, el polvazo de la rusa y el cubano en el restaurante de Shannon, etcétera).
En cuanto a la caracterización de los personajes, el acierto ha sido parejo. Ese antihéroe descreído que es Pancho mezcla a la perfección con la niña bien que encarna Shannon, ambos son más que un estereotipo y se rodean de secundarios que evocan sentimientos de lo más variopinto, de la ternura de María y Luisito a la exasperación que provoca el beato Martín, sin olvidarnos de la egoísta aunque cómica Svetlana. Punto y aparte merece Ernesto, un cubano primitivo y simplón que acapara las los momentos más desternillantes de la obra.
Para terminar, sólo decir que el experimento se salda con un sobresaliente inesperado, dada la exigencia y el riesgo del desafío que ambos autores han afrontado. Se nota que tanto Ponce como Márquez son avezados escritores con infinidad de recursos, conocen bien cómo embeber al lector en sus renglones y transmitirle emociones de toda índole. Y por si fuera poco, se muestran certeros en su mensaje, en esa relación ficticia entre la victoria y la derrota —éxito y fracaso— que acaba volviéndose tan real como la vida misma, pues la distancia que separa a ambas es mínima y quién sabe cuándo te sorprenderá una u otra. Genial epílogo, toda una lección de vida.
AUTORES
Fran Márquez (Sevilla, España) Nacido en Sevilla, desde muy temprana edad, sintió la necesidad de atrapar mundos mediante las palabras. El cometido
resultaba osado, pretensioso, utópico en su más estricto significado, pero lo ha conseguido creando infinitos universos imaginarios para sus lectores. Ha publicado el cuento infantil Bingo, Bongo y Bengo en Amazon, traducido al portugués, inglés, francés, italiano, catalán y euskera. Asimismo, sus innumerables microrrelatos y cuentos obtienen muy buenas críticas en las redes sociales. Sus cuentos han sido publicados en la revista literaria Cuentos en Red y en el periódico Correo Canadiense. El relato La Sirena fue escogida , por votación popular, como la mejor publicación del mes de diciembre de la revista literaria Calidoscopio.
Cuauhtémoc Ponce (Guadalajara, México) Es escritor y trotamundos. Su escritura se basa en sus innumerables vivencias,. Ha publicado Historias de algún bar, Experiencias de algún amor, Diez personas sin suerte, Antagonismo (en coautoría con Fran Márquez), Mi locura: microrrelatos, cuentos y algo más. Ha publicado en el periódico Correo Canadiense y en la revista literaria Cuentos en Red.
Antagonismo estará disponible en el siguiente punto de venta: